lunes, 29 de septiembre de 2014

La Comunicación y la Ilusión de la Comunicación


Dice Stephen Arroyo:

Aunque los terapeutas y los consejeros hacen hincapié constantemente sobre la comunicación a fin de resolver dificultades en las relaciones, mi observación es ésta: si espontáneamente no existe la base de la empatía, de las energías armoniosas, de la solicitud y de la mutua  comprensión  -y eso se reflejará en la comparación de los mapas– entonces, no podrá haber una comunicación real.

El trato verbal no es comunicación! Si algunos de ustedes pasaron por ciertos procesos terapeúticos en los que se supone que tienen que “comunicarse”, reconocerán esta secuencia de hechos: luego de algunas grandes tormentas emocionales y, con frecuencia, después de gritos y llantos, se logra a menudo la ilusión de una comunicación y la sensación de que, de allí en más, habrá más empatía con el interesado. Sin embargo, dos semanas después están de nuevo donde empezaron. No quito valor a todos esos métodos terapéuticos, pero son buenos sólo para ciertas personas, en ciertas épocas de sus vidas. Pero, con frecuencia, se hacen surgir falsas esperanzas y a menudo nuevas ilusiones ocupan el sitio de las viejas, si perdemos nuestro equilibrio psíquico.

Si piensan en la palabra “comunicación”, bien pueden pensar, en primer lugar, en Mercurio. Desde luego, hay comunicación en todos los niveles de todos los planetas y elementos, pero concentrémonos por un momento en Mercurio, que simboliza la comunicación de índole intelectual, verbal y racional. Aunque los Mercurios de dos personas no estén armonizados o aunque haya aspectos tensionantes de Mercurio en la comparación, una fuerte corriente de afecto y simpatía entre las personas (demostrada por otros factores de ambos mapas) podrá establecer, no obstante, un canal de comprensión entre las dos, de modo tal que la falta de comunicación de Mercurio no sea patente.

Podemos comunicarnos en tantos otros niveles que no es mucho lo que tenemos que conversar para entendernos uno con otro; en el nivel emocional, en el nivel intuitivo, sabemos cómo se siente la otra persona, y a veces podemos leer su mente. En realidad, en esta clase de relación, si tratamos de conversar demasiado específicamente con la otra persona, a menudo todo se enreda y confunde. Pero, en relaciones como ésta, si los canales de la armonía emocional se destruyen o cierran por la desilusión o el desencanto de una persona en su relación, o por el radical cambio de actitud de una persona durante un período crítico personal, entonces no pasa mucho tiempo para que ambas personas empiecen a darse cuenta de que durante muchos años no han estado en comunicación.

Entonces salen a la superficie, de modo muy patente, todos los problemas de Mercurio. Esto es cierto también en muchos otros aspectos, no sólo con Mercurio. En las relaciones, como en las vidas de cada uno, las cosas están cambiando constantemente. Dejemos que un tránsito fuerte transforme simultáneamente la expresión de un planeta mayor en el mapa de cada persona, y tal vez empiecen a advertirse muchos problemas latentes de larga data cuando los anteriores canales de armonía y estrecha relación empiecen a desintegrarse. Tenemos que ser capaces de marchar con los cambios, de mantener nuestra perspectiva y de saber que, con el tiempo, todo cambia y se transforma.

No hay comentarios.: