Del libro "Dinámica y Análisis de los Aspectos", de Bil Tierney.
Esta
configuración no es muy común. Relaciona al menos a seis planetas ubicados en
seis puntos diferentes de la carta. Todos ellos deben hacer sextil entre sí, lo
que crea una reacción en cadena. El Gran Sextil crea un gran hexagrama a través
de la carta. Esta configuración está compuesta por dos Grandes Trígonos y tres
oposiciones. Al existir tantos trígonos, la gracia salvadora del Gran Sextil
son las tres oposiciones. Estimulan la conciencia de que necesitamos devolver
al medio ambiente lo que con tanta facilidad desarrollamos dentro nuestro si
queremos utilizar tantas oportunidades de forma constructiva y equilibrada.
Debido a la grandeza de esta configuración, nos serviremos mejor de ella cuando
ayudamos al crecimiento de una causa social que nos lleve a usar todos nuestros
talentos y habilidades. La ayuda y la asistencia llegarán de diferentes áreas
del medio ambiente en tanto se mantenga abierto, cooperativo, y sea capaz de
complementar las necesidades de los demás. Estas oposiciones nos recuerdan que
debemos coordinar nuestras actividades y dirigirlas hacia objetivos externos,
en vez de realizarlas sólo para nuestro exclusivo beneficio. Somos estimulados
para movilizar creativamente nuestras fuerzas y para utilizarlas en el mundo
externo.
Con
dos Grandes Trígonos, los recursos creativos son abundantes y necesitan ser
conectados. Existe una enorme sobrecarga de capacidad que exige ser explotada
activamente. Si permite que se desarrolle la dispersión o el estancamiento
(ayudado por la pasividad de los múltiples trígonos), será como si
desperdiciase una fruta en su sazón. Talentos que están a punto para expresarse
comienzan a disminuir debido a su falta de activación. La tentación de perder
el tiempo, volverse perezoso o indiferente a los poderes de esta configuración,
deberían evitarse a cualquier costo. Este individuo despide un magnetismo
especial que podría tener una influencia benéfica, y carismática sobre los demás.
Hace las cosas mejor cuando se permite una variedad de experiencias en la vida
(debido al efecto ramificador de los seis sextiles). Sin embargo, con al menos
seis planetas unidos en esta configuración, el horóscopo presenta pocas
cuadraturas. Por lo tanto, el Gran Sextil nos exigirá un esfuerzo consciente
para trabajar más duramente en el desarrollo de la disciplina interna, la
resistencia, la paciencia, y el impulso ambicioso necesarios para utilizar más
plenamente nuestros dones especiales. De lo contrario, al carecer del impulso y
del ímpetu de las cuadraturas, puede convertirse en un diletante privilegiado y
dotado, demasiado inquieto y sobreestimulado como para manejar con maestría
ninguna habilidad. El Gran Sextil indica la presencia de una influencia
«dispersante», aunque con un mayor acceso social que los sextiles natales
comunes.