viernes, 20 de mayo de 2011

Los Dos Estados de Atención

Un texto perteneciente al libro “El Camino del Poder”, de Lena Stevens y José Stevens, (Ediciones Gaia, Colección Gaia Perenne).



Los chamanes de todo el mundo identifican dos estados distintos de atención que deben ser comprendidos con claridad y aprendidos para adquirir verdadero poder. Los chamanes de la tradición tolteca de América del Norte y Central usan el término “primera atención” para describir la atención a la realidad física que tiene la mayoría de la gente la mayor parte del tiempo. La primera atención es la que usamos para identificar los objetos cotidianos y percibir el mundo ordinario. En la primera atención, una cueva es un agujero en el suelo, una silla es algo en lo que te sientas, un árbol sirve para dar sombra o para extraer madera, y así sucesivamente. Usamos esta primera atención tan constantemente que la mayoría de la gente no puede imaginar ningún otro modo de percibir.


Existe otro nivel de percepción que da acceso a otro conjunto de realidades que los chamanes toltecas llaman la “segunda atención”. Michael Harner, el antropólogo americano que dedicó su carrera profesional a estudiar el chamanismo, llama a este conjunto de realidades la “realidad no ordinaria”. Esta realidad no ordinaria puede ser vista con la segunda atención, un término usado para describir una amplia variedad de estados y realidades a las que los chamanes y visionarios de todo el mundo acceden a través de la búsqueda de la visión, de la oración, de la meditación, de la danza y de otros muchos medios. Para alguien que use la segunda atención, una cueva puede ser un pasadizo hacia realidades ocultas del mundo espiritual donde es posible hallar soluciones a los problemas; una silla podría haber retenido los pensamientos y sentimientos de un antiguo ocupante, y podría ser dañino sentarse en ella; un árbol puede ser un aliado, un poderoso espíritu que nos ayuda.


Como la mayoría de la gente sólo es conciente de la primera atención, tiende a negar la existencia de la segunda diciendo que es pura superstición, ilusión o imaginación. Un chamán podría responder a ese rechazo planteando la siguiente pregunta: “¿Qué es lo que no es imaginación?” Una comprensión así es difícil de entender para quienes sólo usan la primera atención, y cuando empiezan a entenderla pone en peligro sus creencias profundas sobre la naturaleza de la realidad, lo que suele generar miedo y confusión. Entonces parece que lo más seguro es cambiar de tema. Hace falta coraje para mantener el diálogo abierto, pero, si persistes, abrirás la puerta a la segunda atención y acabarás aprendiendo por propia experiencia dónde está la verdad y dónde la ilusión.


Según la perspectiva chamánica, el primer estado de atención es tan hipnótico e induce un trance tan profundo que la mayoría de la gente se queda contenida en sus confines. Es como estar en prisión o tener un mal sueño. Aunque a veces la primera atención nos produce placer, e incluso nos aporta belleza, no tiene verdadero poder porque en realidad es un fantasma, una imagen en el espejo que parece sustancial pero sólo es un reflejo.

Como descubrieron los físicos del siglo pasado, lo que llamamos realidad concreta sólo es espacio vacío; la solidez de los objetos es producto de nuestra imaginación. A decir verdad, nuestra realidad ordinaria no existe.



1 comentario:

Anónimo dijo...

Hola Ana, creo que los trabajos del antropólogo Carlos Castañeda se cuentan entre los que iniciaron la difusión de estas cuestiones. Luego la lectura masiva hizo de las suyas pero recomiendo el prólogo del clásico "Las enseñanzas de Don Juan" así como el libro en sí, en sus primeras ediciones.
Gracias VL