Texto perteneciente al libro "Dinámica y Análisis de los Aspectos", de Bil Tierney
Si
esta configuración se administra mal, la vida parecerá llena de inarmonías
internas y de tensiones que crearán situaciones externas cargadas de
responsabilidades y de aprietos. Dado que una Gran Cuadratura está compuesta
por cuatro de las mismas, creará un sentimiento interior de fricción, esfuerzo,
y presión. La convergencia dinámica de fuerzas generadas puede brindar la
cantidad necesaria de combustible psicológico requerido para sentirse
monopolizado por un estilo de vida de propósito definido. Como sea que la Gran Cuadratura
está compuesta también por dos oposiciones, permite desarrollar una percepción
mayor de las relaciones sociales. Estas oposiciones ofrecen la perspectiva, el
equilibrio, y la estabilidad necesaria para llegar a una armonía interna. O
pueden crear conflictos en las relaciones que provoquen antagonismo y
desavenencias, trayéndonos energías negativas a través de las acciones ajenas.
Mucho dependerá de las decisiones del individuo y de la forma en que resuelva
este complejo dilema. La
Gran Cuadratura ejercerá una gran influencia en un sentido o
en el otro. Sugiere la presencia de complicadas y cruciales lecciones kármicas
que responderán a la cualidad (modalidad) y a las Casas que ocupen los planetas
implicados.
Esta
configuración parece operar más fácilmente cuando el individuo se ocupa de
asuntos de naturaleza enérgica, vigorosa y activa. La tensión de las cuatro
cuadraturas incrementa el temperamento de por sí impaciente y dogmático de esta
cualidad. Llevarán al individuo a iniciar acciones precipitadas, aunque poco
cautas. La agitación lo empujará a estar siempre activo, pero el exceso de
energía no lo dejará terminar lo que haya comenzado impulsivamente. Iniciará
los proyectos con un grado de empuje e impulso superiores a la media, pero carecerá
de la constancia necesaria para concluir lo empezado. Las dos oposiciones
indican que los demás le obligarán a que sea más controlado, confiable y
consistente. Aunque opte por resistir abiertamente las presiones para
disciplinarlo y haga lo que desea, rara vez tiene una idea definida y funcional
de lo que quiere.
Las
oposiciones cardinales nos previenen que la cooperación y la consideración
hacia los demás son determinantes para que se puedan cumplir con éxito nuestros
objetivos. Primero debe aprender a compartir gustosamente las actividades de
los demás y a cultivar la sociabilidad, luego lo ayudarán a lograr sus metas.
Aprendiendo a controlar su tremenda reserva de energías y a utilizar su sentido
común en lo que emprenda, podrá evitar las trampas usuales de esta Gran
Cuadratura (que son la impetuosidad, las acciones temerarias, la elección
equivocada del momento, la confianza exagerada en sí mismo y las
confrontaciones directas con los demás. También puede indicar una propensión a
los accidentes debido a la impulsividad, especialmente si Marte y/o Urano
forman parte de la configuración. En general, mostrará una sobredosis de
empuje, impulso y agresividad. La ambición para triunfar es muy fuerte, así
como la vena competitiva que le asegurará el éxito en el campo al que se
dedique con tesón. Si no recapacita sobre sus impulsos naturales creará con
facilidad desorden y un ambiente de nerviosismo. Será una encarnación
significativa llena de crisis y de relaciones cambiantes que le exigirá
acciones rápidas y decisivas. A nivel físico, la vida será extenuante.
Aunque
a menudo se verá frustrado por los obstáculos que bloquean su acción directa en
la expresión de sus necesidades conscientes, el individuo aprenderá con el
tiempo a aplicar su temperamento emprendedor y obcecado con mayor persistencia
para sortear un objetivo significativo por vez. Esto le exigirá reprimir su
hiperactividad natural y aprender a ir más despacio. Las lecciones importantes
de la Gran Cuadratura
Cardinal son: el desarrollo de la paciencia, la serenidad interior, el aguante,
la firmeza y el aprendizaje de cómo organizar mejor el tiempo y la energía. Sin
estas cualidades, esta persona tiende a precipitarse en nuevas actividades
antes de que los proyectos presentes puedan florecer por completo. Debido a la
falta de planeamiento, no puede alcanzar sus logros. Cuando actúa muy
prematuramente o con demasiada urgencia, sus acciones no producen resultados
satisfactorios. Tiene mucha energía para quemar pero, sin centrarse, sólo
provocará destellos de corta duración que morirán con rapidez.
Esta
configuración podría considerarse como la más exasperante y difícil cruz que se
pueda soportar, ya que señala actitudes en nuestra conciencia que han sido
durante varias encarnaciones puntos conflictivos repetitivos. Ahora se
manifestarán como problemas muy enraizados y difíciles de erradicar que
exigirán toda nuestra concentración. La Gran Cuadratura
Fija tiende a usar sus poderosas energías en el terreno de la voluntad y del
deseo, creando ilustraciones interiores que suelen producir crisis emocionales.
Las cuatro cuadraturas intensifican el poder de la voluntad y la inflexible
fijeza de esta cualidad. La tendencia es a comprimir los sentimientos y a
fortificar la voluntad hasta tal punto que las presiones se internalizan en los
niveles más profundos de la psique, resultando de ello bloqueos o inhibiciones.
Los sentimientos se pueden cristalizar. Necesitará flexibilidad emocional para
no volverse demasiado arraigado a sus hábitos.
Las
dos oposiciones reflejan conflictos centrados en la posesividad y en la firme
resistencia al compromiso o a compartir con los demás. El individuo deberá
aprender a ser menos obcecado y absolutista en sus exigencias si desea que las
relaciones funcionen de manera mutuamente satisfactoria. Aunque la Gran Cuadratura
Fija sugiere una poderosa fuerza interna, una terrible determinación y una
habilidad planificadora maestra, también indica rigidez y un temperamento
demasiado rutinario como para realizar los ajustes necesarios. Será desafiado
para que realice los cambios indispensables, se adapte a los demás, y busque
activamente nuevas alternativas de autoexpresión. A diferencia de la Gran Cuadratura
Cardinal, que tiene dificultades para motivarse a terminar los proyectos que
inicia con tanta premura, la
Gran Cuadratura Fija también reúne muchas actividades pero se
esfuerza desesperadamente por dominarlo todo al mismo tiempo, puede abusar de
su resistencia fenomenal y de su tenaz persistencia. No quiere perder el
control de sus intereses personales y rara vez permitirá que los demás se hagan
cargo de sus asuntos. Si Marte, Urano, o Plutón forman parte de esta
configuración, se enfatizarán la intolerancia, el comportamiento dictatorial y
la obsesión por el poder (especialmente en los asuntos de las Casas
implicadas).
Ésta
es la Gran Cuadratura
del extremismo, la energía que genera puede expresarse a través de la mayor
devoción y motivación, o la peor crueldad y degradación. En esta encarnación,
el individuo se siente presionado constantemente para purificar su potente naturaleza sentimental y
para limpiarse de todos los prolongados resentimientos, hostilidades, celos y
odios ulcerados que cobija en su interior. Las desarmonías emocionales
interiores que confronta pueden con facilidad volver sus congestionadas
energías hacia el cuerpo físico, manifestándose como problemas de salud
psicosomáticos que implican la acumulación de toxinas que no serán fácilmente
eliminadas. Usualmente, las partes del cuerpo que corresponden a los cuatro
signos fijos serán las más vulnerables. Las enfermedades que se originan en las
tensiones de la Gran
Cuadratura Fija serán probablemente de naturaleza crónica o
incurable, ya que los factores tensionales que hallamos aquí están muy enraizados
y son muy difíciles de alterar. Los síntomas problemáticos pueden volverse
crónicos. La vida le enseñará inevitablemente cómo suavizar su voluntad y cómo
abrir su corazón a un nivel de amor más universal. Una vez que se dedica con
seriedad a un servicio espiritual y elevado con un sentido consciente de
altruismo, podrá romper la cristalización destructiva de esta configuración. Al
aceptar la vida en sus propios términos con un sentido de compasión y
comprensión en vez de forzarla a satisfacer sus propias exigencias
irresponsables, se convertirá en un factor estabilizador para muchos.
Esta
inquieta configuración parece operar mejor en los campos de la expresión
mental. Sin embargo, la tensión creada por las cuatro cuadraturas a menudo se
manifiesta como un gran nerviosismo y una inquietud extrema, aunque también
realza la percepción del individuo y el vigor mental. El principal problema de
esta Gran Cuadratura es su inclinación a tener una gama de intereses demasiado vasta
como para que el individuo pueda contenerlos en sí mismo con éxito y
controlarlos. Aunque sabe de todo y es una compañía estimulante, será
probablemente inconsistente y poco metódico en la ejecución de sus planes. La Gran Cuadratura
Mutable provoca frustraciones debido a su variabilidad, escaso poder de
concentración, indecisión, sugestibilidad negativa, y una tendencia a ceder a
las presiones externas en vez de resistir o aceptar el desafío. Este individuo
es propenso a la ultra adaptación, ajustándose a situaciones que no lo
benefician y, aunque busque el significado inteligente y el propósito, rara vez
se disciplina lo suficiente como para aplicar el conocimiento que reúne al
azar.
Las
dos oposiciones denotan que el individuo necesita integrar más profundamente su
sentido de análisis lógico y su habilidad racional (mente concreta) con su
potencial de fe y sus conceptos teóricos o creencias (mente abstracta) a fin de
comunicar con éxito su potencial. Su tendencia es a oscilar, vacilar y permanecer inseguro acerca de cuáles son sus
necesidades en las relaciones. Esto puede crear en sus uniones una
inestabilidad añadida o una falta de
confiabilidad, que entonces creará conflictos. La Gran Cuadratura
Mutable no presenta un impulso directo por activar las energías a la manera
dinámica de la Gran
Cuadratura Cardinal. Ni despliega el acercamiento firme y
consolidador hacia el poder y el control que posee la organizada Gran
Cuadratura Fija. Sin embargo, puede sensibilizar al individuo para responder
con un grado de conciencia más refinado, aunque a menudo la persona se sentirá
preocupada o aprensiva acerca de las diversas facetas del conflicto que no
pueda resolver mentalmente.
Esto
puede producir una gran tensión nerviosa que agotará y consumirá su vitalidad (particularmente
con Mercurio, Marte, Saturno y los planetas de la Octava Superior
ocupando los signos de Géminis y Piscis, ya que los signos de aire y agua no se
estabilizan ni centran con facilidad).
Las
tensiones deteriorarán o perjudicarán el uso de sus facultades intelectuales
hasta que haga un esfuerzo activo y consciente por enderezar y profundizar su
mentalidad. Esto significará aplicar una discriminación mayor y juicio a los
asuntos que se relacionan con los planetas implicados. Para evitar dar inacabables
giros mentales o carecer de dirección, deberá aprender a controlar la expresión
de su mente. Dado que la paz de la mente es difícil de conseguir, se
beneficiaría si practicase la meditación, la contemplación y el autoanálisis
reflexivo. Para mí, esta Gran Cuadratura es como un molino de viento en medio
de un huracán. Aunque produce variedad y mucho talento (a veces incluso una
sobrecarga de habilidades mentales y capacidades), esta persona rara vez se
centra en algo con la intensidad suficiente como para dominar las técnicas o
desarrollar un estilo de expresión definido y personal. Quizás la mayor
desventaja de este tipo de Gran Cuadratura sea su falta de convicción y de
empuje para superar las condiciones externas limitadoras. En vez de ello, se adapta
a cualquier situación existente, aunque sea negativa o poco dinámica. Las
enfermedades pueden expresarse a través del sistema respiratorio (el que está
íntimamente ligado con el proceso mental), del nervioso y también de la mente.
Los
síntomas vienen y se van, no son crónicos y permanentes como en el caso de la Gran Cuadratura
Fija, ni agudos y críticos como en la Gran Cuadratura
Cardinal. Esta Gran Cuadratura elimina las tensiones a través del esfuerzo
creativo en el campo educativo y de la comunicación.
Si
al menos uno de los planetas de la Gran Cuadratura se ubica en un signo de cualidad (modalidad)
diferente, la configuración será Disociada. En ese caso, no se forman cuatro
cuadraturas naturales, ni una de las oposiciones estará formada por opuestos
polares. Así es como una de las oposiciones presentará un tono de quincuncio.
El planeta fuera de signo creará un aspecto de trígono a uno de los planetas
más un aspecto de sextil al otro planeta. Las sub-influencias del trígono y del
sextil pueden ayudar a disipar el nivel de frustración (psicológico, no
circunstancial) con una actitud más flexible y creativa en la expresión de los
factores tensiónales indicados, o dispersará más la conciencia de manera que el
individuo evitará la confrontación directa y forzosa tal cual exigen las
cuadraturas.
El
quincuncio impedirá que las tensiones se definan con nitidez, las presiones
normales de la Gran
Cuadratura irán perdiendo la intensidad necesaria para
desarrollar una percepción plena de cómo confrontar y resolver estos asuntos.
Pero considerando la naturaleza ajustable del quincuncio, la fluidez y la
inspiración del trígono y la flexibilidad del sextil, una Gran Cuadratura
Disociada Fija ayudará a minimizar la rigidez y la resistencia al cambio.
Operará con más facilidad que la normal, Por otra parte, estas influencias en
el caso de la Gran
Cuadratura Disociada Mutable operarán en contra de los
intereses del individuo, por razones obvias. Al igual que el Gran Trígono, la Gran Cuadratura
puede considerarse como una
configuración cerrada, con gran capacidad para la autorrepresión. En este caso,
puede acentuar la inquietud general de esta configuración (mientras que la
autorrepresión del Gran Trígono se siente más protectora). Por lo tanto,
cualquier planeta exterior que se halle en trígono, sextil, o incluso quintil a
uno de los cuatro planetas de la Gran Cuadratura , puede convertirse en una fuente
de alivio, ayudando al individuo a canalizar constructivamente esas energías.
Si varios planetas poseen ese tipo de aspectos, observe la naturaleza del que
se encuentre en orbe más exacto (y especialmente si también rige un ángulo de
la carta y/o aspecta a más de uno de los planetas de la Gran Cuadratura ).
El
planeta que ayudó al devoto humanitario Albert Schweitzer a transmutar la
tensión de su Gran Cuadratura Fija fue Venus,
(que representa el amor, el espíritu misionero, la inspiración, la
benevolencia, y el carisma), regente de su Ascendente Libra dándole humanidad y
preocupación por la sociedad (sugiriendo acciones personales y esfuerzos en
beneficio de los demás).
Cuando
la Gran Cuadratura
está formada por tres planetas en diferentes
puntos de la carta más el Ascendente, señala a un individuo que experimentará
dificultades enormes para afianzar su identidad personal en el medio ambiente.
Las crisis mayores lo presionarán fuertemente para confrontar y alterar sus
conceptos de autoimagen. La mayor diferencia entre esta versión de la Gran Cuadratura y
la normal, es que en este caso está implicado un ángulo y no un planeta. Aunque
el ASC y el MC pueden ser tan importantes en su influencia como un planeta, no
representan impulsos dinámicos que requieran ser expresados. En vez de ello, y
según el signo en que se ubiquen, estos ángulos describirán nuestra actitud en
relación con las condiciones externas que debamos confrontar. En otras
palabras, los ángulos no emiten energía, pero son más receptivos a las fuerzas
generadas fuera de nuestro campo de conciencia. En este caso, los impulsos de
los tres planetas interactúan con un gran nivel de tensión y se filtran a
través del ASC, según la expresión indicada por el signo ascendente. Lo mismo
ocurre con el MC cuando se relaciona con la Gran Cuadratura.
Este tipo de Gran Cuadratura posee una dirección y un foco, de los que carece
la versión normal. Debido a ese interés por lo externo, las tensiones
provocadas por tal configuración se liberarán a través de diversas actividades,
a menudo según las características indicadas por el signo ASC. No quiere decir
que sean manejados mejor, sino que son menos propensos a la autorrepresión
interna. Las poderosas energías de la Gran Cuadratura
indican que la presencia del individuo es sentida con intensidad por los demás,
para bien o para mal. Este tipo de Gran Cuadratura es más objetiva que la
formada solamente por planetas (dado que el ASC es parte del eje ASC/DESC,
sugiriendo una percepción externa).
Cuando
el MC es uno de los cuatro puntos vitales de la Gran Cuadratura ,
señala a un individuo con un poderoso potencial para el campo de la profesión,
del status quo social, de las ambiciones públicas y del control mundano.
Trabajará dinámicamente para lograr sus objetivos de manera demasiado agresiva
y obcecada (Gran Cuadratura Cardinal), buscando el poder, manipulando o
dominando (Gran Cuadratura Fija), o de forma errática, inconsistente y poco
práctica (Gran Cuadratura Mutable). Sin embargo, el MC como punto focal de la Gran Cuadratura da
al individuo la capacidad de canalizar sus impulsos urgentes hacia los desafíos
mundanos. Expresada positivamente, esta configuración indicará un potencial
para conseguir grandes logros una vez que el individuo ha sido capaz de superar
sus desventajas iniciales. En general, estos dos tipos de Grandes Cuadraturas
modificadas sugieren una habilidad mayor para exteriorizar las agudas tensiones
de una manera menos difusa y dispersa.
Me
parece que cualquier Gran Cuadratura es una configuración que necesita orientarse
hacia metas u objetivos mayores: todo proyecto social que permita al individuo
salir del estrecho marco de sus intereses, si éste desea beneficiarse de esa
enorme carga de energía. Estas configuraciones necesitan actividades apropiadas
para mostrar su grandeza.
EL RECTANGULO MISTICO
Aunque
esta interesante configuración no se relaciona con la Gran Cuadratura ,
representa otro esquema potencialmente tenso y cerrado. El Rectángulo Místico
relaciona idealmente dos juegos de oposiciones que hacen trígono y sextil entre
sí. Visualmente forma una especie de rectángulo grande. Esta configuración fue
observada posiblemente por primera vez por Dane Rudhyar en su libro The
Astrology of Personality y simboliza el «misticismo práctico», dado que
relaciona a dos oposiciones potencialmente iluminadoras y perceptivas que
pueden alcanzar un resultado ideal o inspirado (debido a la influencia del
trígono) a través de la utilización inteligente y original de esas energías
(influencia del sextil). Sin embargo, dependerá del nivel en que el individuo
experimente las oposiciones (ya que el aspecto de oposición puede expresar
también desarmonía, desequilibrio, fuerzas separativas y tensión
irreconciliable). Normalmente, los desafíos planteados por las dos oposiciones
son confrontados con más efectividad de lo esperado debido a las influencias
integradoras de los trígonos y de los sextiles. El conflicto y la desavenencia
poseerán cualidades estimulantes y alentadoras que ayudarán a encontrar
soluciones. Tales oposiciones son menos propensas a verse paralizadas por
demoras o situaciones de estancamiento. Las perspectivas conseguidas aquí
podrán ser utilizadas para crecer. Cuando esta configuración es expresada
positivamente, los intentos por actuar de forma productiva en las relaciones
serán evaluados más objetivamente y su ejecución será más equilibrada si se
sirve de la percepción y la intuición.
EL RECTANGULO
ANTAGONICO
Esta
configuración relaciona dos juegos de oposiciones que a su vez hacen aspecto de
semicuadratura y sesquicuadratura entre sí. Charles Jayne le ha dado el nombre
a este aspecto múltiple. A diferencia del antes mencionado Rectángulo Místico,
el Rectángulo Antagónico sugiere que las oposiciones se ven más presionadas a
buscar una reconciliación debido a ciertas tensiones sutiles e indirectas. La
voluntad se aplicará con más empeño al logro de la armonía y del equilibrio.
Considerando
la naturaleza de las semicuadraturas y de las sesquicuadraturas, estas
influencias pueden acrecentar el antagonismo y la carencia de compromiso con los
demás, haciendo que este aspecto sea muy difícil de controlar. Pero,
normalmente, el estímulo de los aspectos menores lleva a estas oposiciones a
actuar con más energía de la habitual. Cuando es bien administrado, el factor
adicional de tensión puede brindar a esta configuración una dosis extra de
fuerza y motivación. Naturalmente, ambas configuraciones rectangulares pueden
presentarse en su forma disociada. En mi propia carta, tengo un Rectángulo
Místico Disociado (además de un Gran Trígono y una T-Cuadrada Disociados), y
francamente, mi vida interior me ha exigido que haga muchos ajustes sutiles
(aunque intensos) que pocos individuos realizan. Siempre estoy trabajando en mí
mismo de una forma u otra, generalmente necesito relajarme por completo y asimilar
los frutos de mis esfuerzos de manera placentera sin sentir ansiedad por
corregirme todavía más. Aunque en mi carta hay otros factores que refuerzan
esta orientación, imagino que las configuraciones disociadas muestran la
necesidad de hacer ajustes aunque no se actuará de manera obvia, sean cuales
fueren las circunstancias externas. Para quienes tienen interés, les sugiero
que busquen ejemplos de Rectángulo Místico Disociado y Rectángulo Antagónico
Disociado para ver qué influencias entran en juego, al menos en el nivel
psicológico de percepción. Luego intenten la interpretación. Aunque estas
configuraciones disociadas son demasiado sutiles en la práctica para tenerlas
en cuenta, intentar su interpretación será un buen ejercicio mental que
reforzará su comprensión de los principios.
6 comentarios:
Gracias Ana!
Abrazo! Ana
Acá con una gran cruz fija, me fui al infierno y me encontré con Satán! Ajjaaj sufrí mucho señora.... No sabeis todo lo que sufrí! Y no lo digo de chiste, les deseo suerte a los próximos que nazcan con cruz cosmica!! Jajajaaj (si es que no se suicidan antes de los 5)
Unknown: En respuesta a tu comentario, te cuento que yo tengo una cruz fija y es una energía que, si se canaliza en la construcción de lo propio, es muy enriquecedora. Pero hay que comprenderla para no padecerla. De lo contrario, las cuatro cuadraturas se experimentan como una tensión interior que genera una inmensa energía que no tiene salida. La salida es poner esas energías a trabajar para darles un canal creativo. Saludos. Ana
Hola! , me han dicho que tengo un rectangulo místico en mi carta,; realiza consultas de cartas? Estoy en Buenos Aires Tambien. Quedo a la espera muchas gracias!
Gracias 🙏
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